Por la sangre que me toca quizá
no debería manifestar en público mi consideración sobre ‘Gente muerta’, novela
escrita por Juan González Mesa, y menos en un sitio tan frecuentado como el que
nos acoge. Sin embargo, parapetado tras las primeras y generosas opiniones de
quienes también la han leído, me atrevo a compartir la mía. Disculpen que sea
tan osado: tómenlo como una recomendación entre amigos. En cualquier caso, si
lo hago es sobre todo porque se lo debo a él, así que agradezco a nuestro
anfitrión la oportunidad que me ofrece.
Comenzaré diciendo que ‘Gente
muerta’ no es solo una historia de fantasmas al uso. Ni siquiera ofrece esa
premisa o promesa de sorpresa que dos de los títulos cinematográficos más aplaudidos,
como son ‘Los otros’ y ‘El sexto sentido’. Es otra cosa, es otra vuelta de tuerca al género. Abrimos
sus páginas sabiendo que el personaje principal está muerto, y que es ella,
Andrea Landa, en primera persona, quien relata su experiencia. Todo lo que
sigue es un descubrimiento fascinante. Se narra un universo propio pleno de
talento e imaginación como no había leído desde que Ann Rice refundara el mito
vampírico o Neil Gaiman diera vida a sus Eternos. Como alguna de esas historias
que a su estela generan copias y versiones, y que son el hecho original y permanente
que fundamenta una moda.
El lector encontrará novedosas
referencias a los planos de existencia que nos rodean, explicaciones singulares
de la realidad que le confieren a la narración unas profundas raíces desde las
que se despliega. Se catalogan fantasmas, demonios, territorios y poderes a
medida que la protagonista, Andrea Landa, va observando, comprendiendo y
describiendo para el lector el mundo en el que existe tras su asesinato, y
cuáles son las nuevas leyes físicas, o no, que lo rigen. Y Andrea escribe muy,
muy bien. Destacaría su capacidad para conmover y para crear rotundas imágenes
y descripciones (afortunadamente breves), utilizando para ello unas formas sencillas,
sin abalorios innecesarios.
Respecto a la ambientación, tengo
el privilegio de poder explicar que términos como el Sueño o el Caldero ya eran
manejados por Juan, según recuerdo, en un juego de rol o de cartas que inventó
hace unos cuantos lustros y en el que, supongo, está la base de la cosmogonía
que se plantea en ‘Gente muerta’. Por algún sitio deben aguardar los naipes de
cartulina. (¿Ven que por detalles como este también merecía la pena que el
hermano mayor hablara sobre el pequeño?). Aprovecho este inciso para indicar
que ‘Gente muerta’ fue escrita entre 1999 y 2000, cuando el autor tenía 25
años. Y no lo comento como excusa.
Al fin y al cabo, ‘Gente muerta’
contiene los grandes temas de la literatura: el amor, el odio (el odio que es
el combustible que mueve a Andrea, y no el amor como decía Dante), las
relaciones familiares, la amistad, la fe; los celos, el honor y la esperanza.
Hay venganza, perdón, arrepentimiento. Hay
terror, ternura y violencia, suceden acontecimientos históricos, hechos
increíbles… No encuentro nada en falta.
He dado en dividir la novela en
cinco partes. La primera, de presentación y aprendizaje de Andrea como
fantasma, antecede a otras tres que se corresponden cada una a un viaje, pero
con destinos no solo terrenales. Por no adelantar más, diré que uno de estos
viajes transcurre por la Europa Central de la segunda década del siglo XX,
durante la Gran Guerra. Los otros dos destinos no aparecen en ningún atlas. No
obstante, buena parte de la trama se desarrolla en Madrid y otras localidades
españolas, en escenarios y épocas reconocibles.
De manera transversal va
aconteciendo la última parte, que también cierra el libro: se trata de la
persecución de un asesino en serie, un mata niños al que Andrea decide
enfrentarse y cuya eliminación convierte en su meta. Es el hilo que cose el relato,
a lo que tiende, que se intercala, mezcla y funde entre los restantes sucesos. Además,
salpimentan la obra relatillos, anécdotas que, principalmente, ejemplifican la ocupación
de la protagonista como vengadora, a modo de fantasmagórico y precursor héroe
que limpia las calles de villanía gracias a sus habilidades.
Es extensa, pero no inabarcable
como en éxitos contemporáneos, la galería de personajes (vivos, muertos,
demonios, gatos, edificios y otros seres) que aparece en ‘Gente muerta’. De
algunos se espera conocer más, quizá en títulos posteriores: quieres saber más
de ellos. Todos están dibujados y definidos de manera espléndida; sus motivaciones,
las decisiones que toman son coherentes, acertadas o erróneas, y ocupan todo el
espectro posible entre la nobleza y la maldad. Uno de los aspectos fuertes del
autor es su manejo de la psicología de los personajes.
Hay altibajos climáticos en la
narración, si bien se producen debido a una natural regulación de la tensión y
el suspense en un texto de setecientas páginas, no a fallos de estructura.
Incluso permiten que el lector descanse de su desasosiego o de su euforia. A lo
largo de los años una cosa acaba y comienza otra y, en medio, hay paréntesis y
temporadas de calma que las engarzan entre sí. Se muere y se renace. El
aprendiz crece y enseña.
Siento que los elogios, e incluso
la vehemencia, con que terceras personas –entre ellas varios escritores- están
ensalzando ‘Gente muerta’, propiciará que los posibles excesos que haya
cometido me sean perdonados. Ya ha habido varios debates en la red en los que se
ha defendido la novela de manera tan pronunciada (exagerada he tenido que decir
yo mismo) que, casi por lógica, han aparecido contertulios escépticos que han
dudado de su calidad. O de los piropos. Se preguntan quién es ese desconocido
González Mesa para recibir tanto halago. Yo cuestionaría lo mismo. Me había mantenido
al margen.
Sin embargo, ahora digo que ‘Gente
muerta’ es una obra maestra, y de verdad creo que las grandes productoras están
ya perdiendo dinero por no recrear en una temporada de diez capítulos las
imágenes tan poderosas que la desbordan. Es una historia íntima, pero también
muy visual, y los efectos especiales actuales permitirían plasmar criaturas y
parajes como es necesario. Por supuesto, considero que debe ser publicada
cuanto antes en papel, y así esperemos que suceda pronto en una edición
convenientemente revisada.
Algunos lectores desprendidos han
definido ‘Gente muerta’ como “un futuro clásico”. Calificarla así me parece contemplar la
remota posibilidad de que acabara convirtiéndose en un ‘Drácula’ –tan apreciado
por mi hermano y por mí mismo-, o un ‘Frankenstein’. Uno se dice que esas cosas
no pueden ocurrir, que estos títulos son inigualables en el colectivo
imaginario por su maestría y a fuerza de tanta representación, y que nada
moderno puede situarse a esas alturas. Así que deben referirse a clásicos más
recientes como ‘El resplandor’ o ‘Crónicas vampíricas’. Pero mi raciocinio
insiste en rechazar que un chaval anónimo de Cádiz pueda merecer y obtener un
reconocimiento siquiera aproximado.
Aunque a veces, ilusionado, me
digo: ¿de dónde coño era Bram Stoker?
‘Gente muerta’ ha sido publicada por Ediciones aContracorriente
en un pack digital que ofrece, junto a la novela en diversos formatos de
lectura, material adicional como un cartel con la portada imprimible, el relato
exclusivo ‘Tumbas para todos’, un cuadernillo con seis láminas de trabajo
ilustradas sobre el desarrollo de la obra y el universo que la acoge, e incluso
un making off. Puede encontrarse en las principales plataformas de distribución
de e-books.
Además de ‘Gente muerta’, Juan González Mesa tiene
publicadas también en formato digital dos novelas cortas: ‘El exilio de Amún
Sar’ y ‘La montaña’. Próximamente editará una recopilación de relatos que se
titulará ‘Cuentos naturales y sobrenaturales’, y una tercera novela corta: ‘Los
gritos’.
Otros proyectos en los que participa son ‘Tiempo de héroes’,
del que es coordinador de la trama, y la serie para internet ‘Sombras’, de la
que es guionista y que será estrenada próximamente.
Mr. Sambo, muchísimas gracias por el hueco.
ResponderEliminarUn saludo.
Gracias a ti, ahora toca expandirlo todo lo que se pueda. ¿Va la cosa bien?
EliminarA ver si os pasáis y charlamos un ratillo. ¿O es que tenéis muchas oportunidades de conversar con el autor de una de las obras analizadas? jaja
ResponderEliminarJajajajajaja, muy cierto
EliminarOsiris y Juan, Juan y Osiris. Aquí una lectora q se buscará el libro x Sant Jordi. Y vendrá aquí a dejar su (pobre, seguramente) impresión.
ResponderEliminarGracias Sambo por traer siempre cosas buenas!!
Besos a repartir!!!
Gracias a ti Reina, a ver si logramos un best seller y debatimos de cosillas de la obra. Tus aportes siempre son interesantes.
EliminarOsiris además es un tío de los que merecen la pena, sin despreciar a su hermano que no conozco tanto, sólo sé que es medio vampiro jajaja.
Como está la cosa actualmente, me defino más como mediofentátar (Arfio) o Fentátar entero, ya puestos. ¿Qué es un Fentátar? Uno que mide metro setenta y está fibrao, pero pesa 120 kilos, pega un grito de guerra y se pone a repartir galletas de las que no puedes devolver al Mercadona, y se queda solo.
EliminarPero ya digo, es por la situación socioecónomica actual. Cuando la cosa mejore, vuelvo a la sutileza, la noche y la afectación victimista.
Yo tampoco sé muy bien lo que ha dicho :)), aunque creo que le he entendido :)
EliminarNo puedo ver el corte!! :-(
ResponderEliminarOsiris, avisarás dando el enlace o lo que sea para ver Sombras?
Gracias de ante… ;-P
Muacks!
¿Cuando se estrene la serie te refieres? Sí, claro. Gracias por tus palabras.
ResponderEliminarY no seas exagerao Sambo :)
Eso sí, Reina, cuando dices que buscarás el libro por San Jordi... ¿te refieres a que buscarás el papel? Todavía no está en papel. Precisamente quizá en abril haya algo, pero de fechas concretas no hay nada.
ResponderEliminarSí! Me refería al papel!! No estará en abril? Rayos! Es cdo se editan las novedades!!
ResponderEliminarBuscaré la editorial…lo q quiero es leerlo!!!
Y sí, cdo se estrene Sombras.
Gracias Osiris!
Hola, hola, hola, amiga.
EliminarNo sé si estará en Abril, no sé si estará, no sé, en definitiva, en general y en concreto.
Y más ganas que yo no tiene nadie, así que cuando esté, habrá gritos y juerga y, dado que arderá Roma, se cagará la perra y se fundirá el Misterio (aún no conozco el orden), seguro que hacemos que te enteres.
Un saludo.
No sé si estará en abril. Es muy posible que lo editen en papel, pero no sé la fecha. Avisaré.
ResponderEliminarReina, si quieres enlaces para el libro digital, te paso unos cuantos. De la editorial, de FNAC, de Google Play, y de Amazon. Es que no quería que esto fuera un mercadillo y por eso no los coloqué en la reseña :):)
ResponderEliminarY también para El exilio de Amún Sar y La montaña (geniales ambos). Y más baratitos :)
Ummm tiene buena pinta, me haré con ella. Me gusta que la fiambre vea el mundo desde su subjetiva perspectiva, lo cual, como bien dices, zagal, fue una forma de narrar fascinante en la entrevista con el vampiro, de Ann Rice.
ResponderEliminarOtra gran idea ha sido la imagen de portada, éso de poner a Tumbita Iniesta con pelucón de dragg queen has sido estupendo.
Espero que en las ilustraciones interiores aparezcan más seres de inframundo, tales como jovits chepudos (que viven ocultos bajo la hierba alta), jodidos endemoniaos que tronchan sus cuerpos con posturas inverosímiles, gnomos invulnerables al dolor cual cenobitas alfileteados.....
Brioso escritor, por cierto bonico, explícame como se puede medir 170, pesar 120 arrobas y estar fibrao, sin recurrir a los yogures del Dr. Segura.
Un abrazo, sana muchachada.
Me imagino que si respondo a esto desde un punto de vista categórico ambiental voy a quedar como un freaky, porque es una broma de las vuestras, ¿no?
Eliminarjajaja qué va, es un compi nuestro de confianza jaja
Eliminarjajaja, acabo de leer este comentario de autor ¿desconocido? Es que he entrado para colgar una entrevista que ha salido recientemente del horno en una revista digital. Quizá os interese.
ResponderEliminarOs adelanto un párrafo, para que vayais conociendo el paño. Ejemplo de humildad de la buena, la verdadera y honrada:
"Aunque leo y aprecio todo género de Literatura, mis padres literarios, aquellos que marcaron el camino y que más me han influido, podríamos decir que son Stephen King, Lovecraft, Tim Powers y John Tolkien. En menor medida quizá Anne Rice, Gustav Meyrink, Mika Waltari… otros. Bien, pues es de justicia y justifica el aliento que robo, que yo intente cortarles la cabeza y superarlos. Gente Muerta es el comienzo del asalto a sus castillos; a la vez un acto de amor y de canibalismo. Gente Muerta es el inicio de algo muy grande; yo os invito a que asistáis a ello"
http://es.scribd.com/doc/130837651/Ianua-Mystica-N%C2%BA6-Marzo-2013#outer_page_49
El autor desconocido no es otro que nuestro admirado Rústico jajaja.
EliminarEsto no sólo es humildad verdadera, es auténico mourinhismo. A ver si lanzamos esto entre todos.
Jaja, imaginaba que era Rústico.
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