Una vez “Alegría” y “Tristeza” salen de “La Central” (aunque
ya se habían mencionado algunas cosas) se desarrollarán y expondrán todos los
aspectos de ese micromundo y su mitología, el funcionamiento de nuestro
interior al completo. Los pensamientos serán representados por un tren que
recorre todo ese mundo, en una perfecta imagen, “El tren de los pensamientos”.
Se mencionan los “Sueños de día”, que son las ensoñaciones que nos vienen a la
cabeza para distraernos cuando estamos despiertos y aburridos, por ejemplo en
clase…
Son muy divertidos los momentos donde nos introducimos en el
interior de las cabezas de otras personas, especialmente del padre y la madre. Al
final de la película pasaremos por varias, incluidas las de un perro y un gato,
así como la de un púber asustado por las chicas. En la madre parece llevar los
mandos “Tristeza”, pero en su madurez ya controla sus impulsos. En el padre
“Ira”. Eso sí, desarrollando simpáticos clichés femeninos y masculinos. Lo del
piloto brasileño es hilarante. Ninguno de estos personajes tendrá el resplandor
de la “Alegría” de Riley.
“¡Dedo levantado, dedo levan…tado!”
Gestionar sentimientos. Gestionar la vida.
“Del revés” se centra en una niña de 11 años y lo que sucede
en su interior, y lo expone haciendo una reflexión similar a la de “El viaje de Chihiro” (Hayao Miyazaki, 2001), de hecho, el momento que provoca la aventura interior de las dos
protagonistas será una mudanza, abandonar la vida placentera y feliz que
conocieron para coger rumbo a lo desconocido, al cambio, a la necesaria
adaptación… Una etapa de madurez a la que asistiremos tras la brillantísima
introducción que sienta las bases de la propuesta y su mitología.
Todo saldrá mal en un principio en ese nuevo lugar, en San
Francisco, aspecto que puede parecer algo forzado desde el guión. Casa fea y
pequeña, el padre estresado, la pizza con brócoli, el ingrediente odiado por
Riley, no tiene amigas…
Una de las tesis de “Del revés” se destila a través del conflicto de las distintas emociones y sus discusiones, esos distintos puntos de vista a los que según se dé preeminencia irán definiendo nuestra personalidad. Es por ello que cuando “Alegría” falta en “La Central” el carácter de Riley cambia, de igual forma que cuando “Alegría” asuma la colaboración de todos para gestionar problemas más complejos que van surgiendo en la vida de la cría, ella madurará. Se tornará fría cuando sufra la desconexión de las emociones, al no saber gestionar ese cambio, visualizado en la desconexión de sus “Islas de la personalidad”. Sin alegría, islas ni recuerdos esenciales en los que cobijarse.
Así se irán perdiendo las “Islas” que forman su personalidad
paulatinamente, según sus pequeños refugios la van decepcionando. Caerá “Isla
Payasada” primero, “Isla de la amistad” después. Tras la prueba de hockey
fallida caerá la “Isla del Hockey”. Cuando robe dinero se irá a pique la “Isla
de la sinceridad”.
“Adiós amistad, bienvenida soledad”. “Las emociones no
pueden dimitir”.
Los insertos de la vida de Riley según vemos la gestión que
se hace en su interior son certeros y divertidos, irónicos muchas veces,
emotivos otras. Del mismo modo, habrá insertos en sentido contrario: vemos algo que afecta a la chica en su vida cotidiana y se insertan reacciones
de las distintas emociones de su interior. Las emociones
también recordarán cosas a través de Riley que les motivarán a actuar.
Las vivencias en un cambio de entorno, una mudanza, con una
casa nueva, un colegio nuevo, nueva gente, son un impacto para Riley, para
cualquier chico. Se exponen con brillantez, como siempre que Pixar toca los
temas más profundos de la infancia. Desde las vergüenzas porque los padres la
acompañen al colegio a la necesaria aceptación con sus compañeros… El momento
del llanto en público será un punto de inflexión.
“¡Oh no! ¡Estamos llorando… en público!”
La misión se convierte en una épica aventura por lograr que
Riley recuerde, y por tanto sienta, sea ella misma. Para ello hay que reactivar
las “Islas” y hacer funcionar los “recuerdos esenciales”.
La película juega brillantemente con los cebos y los ecos. Ya vimos a Bing Bong pintado y luego le conoceremos en persona en el interior de Riley; también veremos el cohete con el que jugaba Riley de pequeña y que iba siempre con Bing Bong, que será esencial en la trama, en la escena más conmovedora; incluso se usan cebos y ecos de forma minimalista y puramente narrativa, como esa cama elástica que vemos fugazmente en la “Isla de la Familia”, que será usada poco después en el clímax final junto a esos clones de novio imaginario… La bolsa de Bing Bong, donde cabe todo porque es imaginaria (debo reconocer que me agobiaba ver a “Alegría” con los 5 recuerdos esenciales a cuestas)...
“Lloro chuches… las de caramelo son deliciosas”.
La situación llega a un límite quizá algo forzado, con la
fuga de Riley de su casa por una brumosa calle que escenifica ese vago
futuro. Al mismo tiempo asistimos a la caída de “Alegría” y "Bing Bong” al
vertedero de recuerdos (que se alarga en demasía, ya que podían haber caído con
el tren), hacia el olvido, lo que lleva a la escena con la que comencé el análisis.
Esta parte final se va un poco de madre en esa aspiración
por ofrecer acción y dinamismo, dosis de aventura, con escenas muy exageradas
en esa persecución a "Tristeza", el uso de novios imaginarios clonados y el plano
volador con cama elástica para llegar hasta “La Central”.
La conclusión deja divertidos detalles y nuevas islas como la
de la “Discusión amistosa”, el “Amor trágico de vampiros”, la “Isla de la Moda”, la “Isla de las Boy-Bands”…
-Asco: ¿Qué es pubertad?
-Alegría: No lo sé… No será importante.
“Por si acaso”.
“Al fin y al cabo Riley tiene 12 años, ¿qué podría pasar?”
“¡Ser guay es tan agotador!”
A pesar de ciertos defectos, “Del revés” es una joya de
deslumbrante inteligencia e ingenio. Otra joya facturada por Pixar que merece
estar entre sus títulos más destacados, sin ser de los más perfectos. Además, y
siguiendo esa nueva filosofía que se ha impuesto en la productora de sacar
secuelas de sus mejores obras, se aprecian muchísimos indicios y aristas a
explotar en un futuro. Una propuesta que da para muchísimo y de la que se
pueden sacar brillantes secuelas o bifurcaciones.
Me ha gustado mucho el análisis.
ResponderEliminarVeré la película seguro, y estoy contigo en es una forma inteligente y original de hablar de sentimientos, procesos, cambios…
Lo has explicado de lujo a lo largo del análisis. Muy profundo, sensible, y a la vez ligero y entendedor.
Gracias!!!
Bss
Gracias, Reina. Esta parte es más ligerita, los matices, pero es un análisis que me ha dejado muy satisfecho.
EliminarTuve la oportunidad de verla en verano, cuando llevé a mis hijas al cine, y me quedé asombrado: es una verdadera joya en todos los aspectos, con momentos hermosos de verdad, como el inicio o la desaparición de Bing Bong (menudo puñetazo por lo bajo, en el buen sentido). Cine de verdad, por mucho que sea de animación, y un rato que se pasó volando. La cantidad de momentos buenos que tiene es inmensa y ya los analizas muy bien a lo largo de la crítica; una película que es capaz de hacerte reir, llorar, y emocionarte.
ResponderEliminarDestacaría tambien la música, con tonalidades muy pegadizas, así como la factura técnica del film, aun que destacar esto ultimo en películas de Pixar sea de perogrullo. Yo la recomiendo a cualquiera que no la haya visto, y sobre todo a los seguidores de las producciones de Pixar que, como yo, pensaban que habian bajado un poco el piston ultimamante. Con esta del revés vuelven a ponerse en órbita.
Genial análisis como siempre, Mr Sambo.
Así es Nottias, es un joya que se sitúa entre las grandes películas de la productora. Espero que leyeras la 1ª Parte, donde daba más claves y hablaba, precisamente, de Bing Bong.
EliminarUn abrazo.
MrSambo, a mí me pareció una película genial, pero como no he visto ninguna de las candidatas a los Oscar, tengo que hacerte una pregunta: Si de ti dependiera ¿la pondrías en la lista de candidatas a mejor película? (ojo, mejor película "a secas", no sólo mejor película de animación) La verdad es que en mi opinión Pixar ya debería tener algún Oscar en esa categoría, pero claro ¿cómo le vamos a dar el Oscar a una peli de dibujos? Es to sí que es discriminación en los Oscar.
ResponderEliminarBuena pregunta. Es evidente que hay géneros absolutamente ninguneados. La animación es uno de ellos, aunque ha tenido alguna nominación reciente a mejor película a secas, como TOY STORY 3. Esta DEL REVÉS podría haber estado entre las nominadas, sin lugar a dudas, por calidad, mejor que buena parte de las elegidas. Lo mismo CAROL, aunque esta como película de imagen real, pero esto siempre pasa en los Oscar por desgracia...
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