ROBERT ZEMECKIS
Viajando en el tiempo.

“
Regreso al futuro”, toda la trilogía, pero especialmente la
primera, es el referente absoluto de las películas sobre viajes en el tiempo.
En el caso de esta película que nos ocupa, la primera, en su vertiente más
sencilla, con una sola línea temporal, donde todo lo que se cambie en el pasado
tendrá influencia directa en el futuro y el presente que conocieron los
protagonistas, cambiándolos en consecuencia.
En “Regreso al futuro” hay una concepción reflexiva y
moralizadora, redentora, una idea que interesa mucho más que las cuestiones
científicas y las paradojas temporales que puedan sacarse de la propuesta.
El cine, como el teatro o la literatura, la dramaturgia, son
artes que pueden viajar en el tiempo desde cualquier época. El cine además
tiene la cualidad de poder plasmar universos enteros ya inexistentes, hacerlos
revivir para mostrárnoslos, para que volvamos a sentirlos y vivirlos. Permiten visitar y recrear tiempos que ninguno vivimos, permiten que nos sumerjamos en
la época de los dinosaurios, en la prehistoria, en la antigua Roma, en la Edad
Media, en la época victoriana... que vivamos sus costumbres, que apreciemos sus
construcciones, sus vestuarios, que todo se visualice ante nuestros ojos
mientras se nos cuenta una historia. El cine es lo más parecido a una máquina
del tiempo.

Todas las artes han viajado en el tiempo o han recurrido a
la idea de viaje en el tiempo, de manera directa o indirecta. Entronca con esa
fascinación que logra el cine, la dramaturgia: crear y visitar mundos pasados,
incluso futuros posibles… Muchos autores clásicos como
Isaac Asimov con “
El
fin de la eternidad”,
Jorge
Luis Borges en varios relatos,
Charles Dickens en “
Cuento
de Navidad”,
Mark Tawin con
“
Un yanqui en la corte del Rey Arturo”
o, como no,
H. G. Wells y
“
La máquina del tiempo” han
jugado con esa idea. Y es que a todo amante de la ciencia ficción suelen
apasionarle los relatos sobre viajes en el tiempo, incluso a los que no son
amantes.
El cine no podía ser menos. Innumerables películas han
recurrido a la idea del viaje en el tiempo para sus tramas, honrando la
imaginación de H.G Wells.


Películas sobre viajes en el tiempo donde se pretende
corregir un error y solventar un problema, o por simple experimentación. Un
juego en una única línea temporada que permite recorrer el pasado de unos
personajes o recrear una época. “
La plaza de Berkeley” (
Frank Lloyd, 1933),
“
Hombre de dos mundos” (
Roy Ward Baker, 1951). “
Más allá de la barrera del
tiempo” (
Edgar G. Ulmer, 1960). El clásico “
El tiempo en sus manos” (
George
Pal, 1960). “
The yesterday machine” (
Russ Marker, 1963). “
Los viajeros del
tiempo” (
Ib Melchior, 1964). “
Viaje al centro del tiempo” (
David L. Hewitt,
1967). “
Te quiero, te quiero” (
Alain Resnais, 1968). “
Los pasajeros del tiempo”
(
Nicholas Meyer, 1979), una entretenida propuesta con
Jack “El destripador” y
H. G. Wells viajando en el tiempo. “
El final de la cuenta atrás” (
Don Taylor,
1980), donde un viaje en el tiempo posibilitaría evitar el ataque japonés a Pearl
Harbor. “
Los héroes del tiempo” (
Terry Gilliam, 1981). “
El experimento
Filadelfia” (
Stewart Raffill, 1984). “
Guardianes del futuro” (
Charles Band,
1985). “
El vuelo del navegante” (
Randal Kleiser, 1986). “
Peggy Sue se casó”
(
Francis Ford Coppola, 1986). “
El fin de la eternidad” (
Andrei Yermash, 1987),
una película rusa basada en la novela de
Isaac Asimov que ofrece una visión
particular de este tema.
“Time
Trackers” (Howard R. Cohen, 1989). “Regreso al futuro 3” (Robert Zemeckis,
1990). “
Atrapado en el tiempo” (1993) la obra maestra de
Harold Ramis, que
no tiene viajes en el tiempo, si no un día que se repite eternamente como fábula
moral. “
Star Trek: Primer contacto” (
Jonathan Frakes, 1986). Parodias del
estilo de “
Austin Powers 2: La espía que me achuchó” (
Jay Roach, 1999).
Interesantes y nostálgicas propuestas como “
Frequency” (
Gregory Oblit,
2000). “
La máquina del tiempo” (
Simon Wells, 2002). “
Timeline” (
Richard Donner,
2003). “
Más allá del tiempo” (
Robert Schwentke, 2009). “
Star Trek” (
J. J.
Abrams, 2009). “
Jacuzzi al pasado” (
Steve Pink, 2009). La entretenida “
Prince
of Persia: Las arenas del tiempo” (
Mike Newell, 2010). “
Men in black 3” (
Barry
Sonnenfeld, 2012). La romántica y emotiva “
Una cuestión de tiempo” (
Richard
Curtis, 2013). “
X-Men: Días del futuro pasado” (
Bryan Singer, 2014). La
entretenidísima “
Al filo del mañana” (
Doug Liman, 2014)…
Las películas que pretenden un enfoque más científico,
jugando con las paradojas temporales o los universos alternativos, menos
centradas en lo humano en ocasiones. El fascinante mediometraje “
El muelle” (
Chris Marker, 1962), que inspiró
“
12 monos”. “
Terminator” (
James Cameron, 1984) y “
Terminator 2” (
James Cameron,
1992), así como el resto de la saga, que ya tiene cinco títulos. La primera
secuela de “
Regreso al futuro”, realizada en 1989, que juega más con las
paradojas temporales y los universos paralelos y alernativos. La irónica “
12 monos” (
Terry
Gilliam, 1995), donde nuestra desesperada lucha por corregir o evitar errores
en realidad los acaba provocando, donde nuestros sueños premonitorios en
realidad son recordatorios (o una advertencia contra nosotros mismos), donde nuestra falta de discernimiento para diferenciar
la verdad nos acaba condenando. “
Paycheck”
(
John Woo, 2003). La compleja
“
Primer” (
Shane Carruth, 2004). “
El efecto mariposa” (
Eric Bress y
J. Mackye
Gruber, 2004). “
Déjà vu” (
Tony Scott, 2006). “
Los cronocrímenes” (
Nacho
Vigalondo, 2007). La sugestiva e intrigante “
Donnie Darko” (
Richard Kelly,
2001). “
Código fuente” (
Duncan Jones, 2011). “
A thousand kisses deep” (
Dana
Lustig, 2011), en una historia que reflexiona sobre la obsesión y el destino.
“
Looper” (
Rian Johnson, 2012). “
Predestination” (
Michael Spierig y
Peter
Spierig, 2014), posiblemente la película más bizarra sobre la idea de los
viajes en el tiempo. “
Interstellar” (
Christopher Nolan, 2014).

Las hay que siendo sobre viajes en el tiempo, dentro de la
trama, no lo son en sí mismas, sino ensoñaciones, sueños o imaginaciones de los
personajes, o un recurso mágico. “
Escándalos romanos” (
Frank Tuttle, 1933)
iría en esa onda, un sueño que lleva al protagonista a la antigua Roma.
“
¿Adónde vamos ahora?” (
Gregory Ratoff y
George Seaton, 1945), un sinsentido
con genio de la lámpara incluido. “
Un yanqui en la corte del rey Arturo” (
Tay
Garnett, 1949). La curiosa “
Viaje a la prehistoria” (
Karel Zeman y
Fred Ladd,
1955). “
En algún lugar del tiempo” (
Jeannot Szward, 1980), con un viaje
hipnótico y romántico al pasado. “
Midnight in Paris” (
Woody Allen, 2011)…
Incluso alguna de la saga de Harry Potter también juega con
este tema. Series como la clásica “El
túnel del tiempo”, las distintas que se han hecho sobre el “Doctor Who”, tanto en cine como en televisión... En “Mitfist” también se ha
tocado el tema, en “Lost”, de
hecho J.J. Abrams es
muy fan de este tema (“Fringe”)…
Así como en infinidad de series de todo tipo. "El ministerio del tiempo" es un notable ejemplo entre nuestras series.

Las historias de viajes en el tiempo sirven, a través del
contraste, para valorar las ventajas que tenemos actualmente y echar de menos
conceptos e ideas que parecen perdidas, para advertirnos de los peligros en los
que podemos caer si elegimos mal, para desarrollar toda una reflexión
metafísica sobre la importancia del pasado, de los actos del presente, de lo
importante que es cada momento, así como ofrecer un paseo completo por toda la
cultura, la mítica, la idiosincrasia (americana en el caso que nos ocupa) más
pura y genuina en épocas de esplendor o decadencia; como reflexiones filosóficas sobre el tiempo
con aires románticos, valorar también el presente o reivindicar las segundas
oportunidades… En definitiva, para multitud de ideas, a menudo interesantes y
sugerentes.
Ciencia ficción.

La ciencia ficción tiene mucha presencia en “
Regreso al
futuro”, pero no porque la película se englobe en el género simplemente, sino
porque actúa de manera referencial y se juega con la evolución y sentido que ha
tenido la misma con el paso del tiempo, esos años que abarca la película.

Ver a
Marty McFly llegar al pasado con ese coche tan
particular, que perfectamente puede ser visto como una especie de nave espacial
por los de 1955, desde el futuro y con un traje anti-radiactivo, que bien
parece el de un astronauta, del cual vemos como el casco le cae en la cabeza a
Marty mientras intenta evitar espantapájaros y graneros al cambiar
repentinamente de escenario (los citados terrenos del viejo
Peabody), gritando
atemorizado, supone un impacto increíble que sólo puede llevar a una mala
interpretación… Una ciencia ficción que estaba en boga en esos años 50, donde
se usaba el género como uno de los más lúdicos entretenimientos o para lanzar
mensajes soterrados contra la amenaza nuclear o comunista.

El espantapájaros que nos recibe en el pasado, nada más
llegar, nos remite a “
El Mago de Oz”. Otro brillante referente usado de forma
magistral.

La familia de granjeros que lo ven, sólo pueden
interpretarlo como un ser llegado del espacio, sobre todo cuando el niño saca
un tebeo de ciencia ficción (creado expresamente para la película), de nuevo
presente, “
Cuentos del espacio”, con una portada donde la nave y su tripulante
son calcados al
Delorean y
Marty con su traje…
“Parece un avión… sin alas”. “Se ha mutado en forma humana.
¡Dispárale!”
“¡Toma, mutante hijo de puta!” “¡Mi pino! ¡Lo ha destrozado!
¡Maldito cerdo espacial! ¡Acabaré contigo!”
La gran escena con la ciencia ficción como protagonista de
forma metalingüística, la tenemos con el shock que
Marty pretende provocar en
su padre mientras está dormido.
George dirá: “…
y ni tú ni nadie de este
planeta me hará cambiar de parecer”… Con esa frase y el conocimiento adquirido,
la afición de
George a las historias de ciencia ficción,
Marty tendrá una
brillante idea. Se colocará su traje anti-radiación y pondrá unos auriculares
en los oídos de su padre dormido...

Una suave panorámica nos enseña la mesilla de
George, un
reloj que marca la 1:20 pasadas, más o menos la misma hora a la que
Marty llegó
a 1955; unos tebeos de ciencia ficción y el silencio. Cuando
Marty apriete el
“play” de su walkman y un riff de
Eddie Van Halen atruene en los oídos de
George, el impacto está logrado.
Marty mencionará en un divertidísimo popurrí a
Darth Vader,
Vulcano, y hará el saludo trekkie (saludo Vulcano)…

En un cine vemos anunciada “
The Atomic Kid” (
Leslie H.
Martinson, 1954), una desconocida comedia de ciencia ficción.

Hay más referencias culturales, musicales, cinematográficas
o televisivas. Oiremos el
Mr. Sandman; veremos anunciada la película “
La reina de
Montana” (
Allan Dwan, 1954), interpretada por
Ronald Reagan, que volverá a
aparecer en un estupendo diálogo, y
Barbara Stanwyck. Más sobre música: “
La
balada de Davy Crockett”,
Patti Page,
Nat King Cole,
Eydie y su “
Eydie in
Dixieland”, aunque según parece al menos el álbum fue publicado en 1959… Es uno
de los muchos pequeños anacronismos que tiene la película (objetos o palabras
que son utilizados en la película, 1955, pero que se fabricaron o usaron
posteriormente a esa fecha).
“¿Ronald Reagan? ¿El actor? ¡JA! ¿Y quién es el
vicepresidente, Jerry Lewis? Supongo que Jane Wyman es la primera dama. Y John
Wayne es el secretario de defensa…”
En la habitación de Lorraine en 1955 hay fotos de actores de
la época, la típica habitación de una joven. James Dean, Gary Cooper…
Ualaaaa!! Menuda documentacionnnnn!!
ResponderEliminarEs de tesis doctoral!!!
Gracias!!
Bss
Jajajajaja las hay menos completas, creo.
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