La primera escena resulta divertida, al mencionado macguffin “a lo Hitchcock” con los elementos de intriga y suspense, se añaden la
simpática relación entre Holmes e Irene Adler (McAdams), la presentación del
villano y mucha imprevisibilidad, juegos de equívocos, engaños, muestra de
habilidades intelectuales, tanto por Holmes como por el mencionado villano,
golpes de efecto… Ritchie retrata a sus personajes suministrándoles todo el
carisma del que es capaz, a menudo mediante situaciones más que por el que
desprendan los propios personajes, un ejemplo de esto lo tenemos en el villano
y la escena en la que todo un restaurante se levanta a la vez para dejarlo
vacío y que queden él y la mismísima Irene Adler solos. Los engaños, las
peleas, los pequeños juegos de ingenio… son otros de los recursos utilizados
para estos menesteres.
A Watson se le presenta sensato, convencional, centrado,
cabal, tranquilo, equilibrado, tan fiel a su amigo como crítico. Watson confía
ciegamente en Holmes al igual que se desquicia y desespera con sus
excentricidades. Es el contrapunto en todos los sentidos, una amitad basada en
el contraste y el afecto mutuo. Watson además es consciente de su importancia
para Holmes, sabe que no puede competir a nivel intelectual con su amigo pero
que le es muy necesario por muchos motivos… Por eso siempre estará ahí.
El montaje de la cinta es muy fresco y dinámico pero no
precipitado ni acelerado.
Pronto se nos preparará la batalla de inteligencias entre
Holmes y Moriarty, en sus encuentros habrá a menudo un tablero de ajedrez, tema
que luego tocaremos. El asesinato de Irene a manos de Moriarty (Jared Harris), afectará
de manera personal a Holmes.
Holmes es un genio y un individualista convencido, que
aprecia la amistad de Watson casi de forma obsesiva, es contrario al compromiso
y siempre verá de forma negativa el matrimonio de su amigo, supone para él
perderlo como colaborador, perder a su vínculo social.
Una de las claves del éxito de la cinta está, precisamente,
en las batallas dialécticas de los dos amigos, en el contraste de ambos.
El doblaje de la cinta es bueno y potencia las
características de los dos protagonistas.
El hermano de Holmes, también muy inteligente, está
interpretado por Stephen Fry y aunque no aporta gran cosa se le utilizará para
algún truco de guión significativo.
La apariencia y el tono del film es bastante ligera, muy
naíf incluso, infantil, aunque detrás de todo eso sí que aparecen interesantes
reflexiones, gracias a la base literaria evidentemente, entre estas podemos
observar que Ritchie no renuncia a esa idea, presente en Sir Arthur Conan Doyle, que relaciona inteligencia y soledad.
La escena de la despedida de soltero de Watson resulta muy
divertida, los diálogos y situaciones de comedia están los suficientemente
conseguidos para sacar la sonrisa y desarrollar algunos de los aspectos
comentados de los personajes. También está divertida la escena de acción
posterior que sucede en la misma despedida de soltero. Aquí aparece una
adivina, presentada de espaldas para mostrar su falsedad, interpretada por la
Lisbeth Salander original, Noomi Rapace. Holmes logrará salvar su vida y
conseguirá su fidelidad.
El duelo de titanes entre Holmes y Moriarty está planteado
como un juego de ajedrez, ya he mencionado que aparecerán tableros en varios de
sus encuentros. Este juego, el ajedrez, no es baladí o un simple recurso
simbólico sino que también funciona para mostrar el funcionamiento de las
mentes de los contendientes. En el ajedrez hay que anticipar varios movimientos
del adversario, por eso tardan tanto en mover, se prevé lo que hará el
contrario y como actuará uno, esta idea no sólo se muestra en el ajedrez sino
que la vemos representada en las famosas luchas de estas películas de Sherlock
Holmes, donde nuestro protagonista diseña en su cabeza como será la pelea antes
de acometerla, sin errores generalmente.
En el final veremos un duelo ajedrecístico-karateka en este
sentido.
En la cinta están presentes los rasgos estilísticos típicos
del cine de Ritchie, cámaras lentas, slow motion, efecto bala, montajes muy
rápidos y divertidos de planos detalle, generalmente, en algunas escenas como
transiciones, esto último muy socorrido en el cine de Ritchie… también
tendremos cámaras flotantes que se recrean en los efectos digitales, por supuesto.
Escena de acción en el tren donde Holmes vuelve a mostrar
sus dotes “adivinatorias”. Simpática. El viaje en este caso nos llevará del
tren al barco y del barco al paseo por tierra a caballo.
El Holmes de Guy Ritchie esconde sus sentimientos en una
máscara de jovialidad, ese tono distinto mencionado, y de frivolidad.
Cuando la película se para y los dos amigos conversan suele
pasarse un buen rato, las mencionadas puyas dialécticas se disfrutan más que
cualquier otro aspecto, Ritchie saca partido de ello, algo que teniendo a
Downey Jr. siempre va a funcionar. Jude Law se muestra a la altura.
El guión es, como de costumbre, lo más mediocre de la función,
muchas de las deducciones a las que se llega son gratuitas y no sirven, si no
fuera porque en la propuesta de Ritchie importa poco, para cubrir las inmensas
lagunas que tiene.
El problema de la cinta no está en su infidelidad, como he
comentado, ya que aunque la haya en ciertos aspectos no son muchos ni tan
transcendentales como parece, sino en la inmensa diferencia de genio que existe
entre los guionistas del film con respecto a Sir Arthur Conan Doyle en todos
los aspectos, especialmente para crear una historia detectivesca con elementos
realmente brillantes, inteligentes y bien construida.
El personaje de Claude (Thierry Neuvic) también es
presentado de espaldas, un traidor, aunque tenga sus motivos. Si bien la gitana
Simza Heron (Rapace) se dará la vuelta en su escena, Claude no lo hará. Ella
acaba siendo honesta.
Holmes se las prometía felices en sus deducciones pero el
minipunto es para Moriaty, que logró engañarle para poder cometer un acto
terrorista.
Holmes y Watson van a buscar a la chica gitana por tren, por mar y a caballo en un excéntrico viaje, veremos una
comunidad gitana lo que nos lleva a preguntarnos qué tipo de fetiche tiene Guy
Ritchie con ello, sólo hay que recordar “Snatch. Cerdos y diamantes” (2000).
En un laboratorio Holmes descubrirá un plan militar, es una
buena escena ese simbolismo del escenario. También tendremos referencias a
Schubert, para que no falte de nada.
La escena de tortura a Holmes estará presidida por un espejo
al que se mira Moriarty, nada será lo que parece. Mientras el mítico villano
tortura a nuestro protagonista, en una oscura escena, Watson se transformará en
Rambo y destruirá todo cuanto se cruce en su camino, no hay nada peor que un
doctor enfadado. Quizá un dentista.
La escena más espectacular de la película es,
indudablemente, el tiroteo en el bosque con una orgía de cámara lenta, slow
motion, efecto bala, pausas, aceleraciones, montajes rápidos… puro estilo
Ritchie. Eso sí, las bombas lanzadas desde el campamento a nuestros
protagonistas parecen saltarse a los soldados que los persiguen para ir a
alcanzarles a ellos. Cosas que pasan, supongo.
Holmes resucitará en lo que es un presagio de lo que ocurrirá
más adelante mientras la esposa de Watson y el hermano de Holmes tienen una
escena de comedia donde el segundo se pasea sin complejos desnudo ante ella.
Las bromas al anciano mayordomo son divertidas.
En la escena final con Holmes y Moriarty en su duelo cara a
cara, Holmes vencerá intelectualmente a Moriarty que verá como todo lo que ha
ido pasando había sido tejido por nuestro protagonista, esto llevará a un
inevitable duelo físico que en esa partida de ajedrez mental anterior a las
peleas, anticipando los movimientos, que vemos habitualmente en la película
será perdida por Holmes. Eso sí, en la improvisación, el cambio a lo
predecible, volverá a vencer. La metáfora del ajedrez es en exceso evidente,
pero perfectamente adecuada. Atentos al suelo donde tiene lugar la pelea con casillas negras y blancas redundando en lo comentado.
El guión más que una gran elaboración nos dejará detalles y
trucos supuestamente ingeniosos con la idea de sorprendernos, es ahí donde se
aprecia la mencionada limitación de los guionistas con respecto a Conan Doyle.
Estos trucos jugarán con elementos y objetos que aparecen en la película y que
resultan aparentemente intrascendentes cuando los vemos para cobrar una
importancia vital en la conclusión (mascarilla de oxígeno, camuflaje, un libro
que mirará Holmes en su primer encuentro con Moriaty, el someterse a tortura
para robar una libreta…), todo esto no exento de artificiosidad y estilo
tramposo, ya que no es sólo que se omitan cosas para manipularnos, lícito, sino
que no se muestra bien todo lo que ve Holmes cuando Ritchie nos muestra su
punto de vista.
En la banda sonora tendremos a Mozart, Schubert… Morricone.
“Juego de sombras” podría llamarse también "Juego de
apariencias", es una de las claves que impulsa la investigación y la deducción,
dejar a un lado lo aparente para descubrir la verdad. Esta idea de las
apariencias está presente durante toda la película en detalles que van
salpicando, buenos detalles de guión y puesta en escena. Como ejemplos, además
de esas presentaciones de espaldas mencionas, veremos a Holmes
disfrazarse, una despedida de soltero que no es como Watson pensaba, el
camuflaje que usa el protagonista, las operaciones estéticas que maneja
Moriarty…
Algún toque de ingenio pero poca elaboración real y
consistente. Aquí no existe, como si lo hay en las obras de Sir Arthur Conan
Doyle, el matiz, el elemento discordante, el cuidado por el detalle, la clave
de la investigación, estos aspectos en la cinta son de brocha gorda y
secundarios.
Pros y contras para un pasable producto final. Un inofensivo
entretenimiento.
Me gusto mas la primera pelicula, la vi mas entretenida. La HolmeVision no me gusta.
ResponderEliminarConcuerdo Ray, la primera es algo mejor. Eso de que no te gusta lo dices porque a ti no te sale, que lo sé yo jajaja
ResponderEliminarMuy de acuerdo con la valoración de la película. Es exactamente lo que pensé, nada que añadir.
ResponderEliminarSólo dos cosas:
- Moriarty se refiere a Watson como alfil. En el balcón las baldosas están colocadas giradas, de modo que las direcciones básicas en las que se mueven son diagonales respecto al suelo. Ellos son también alfiles, manejados por alguien.
- Watson es un Rambo. Ex combatiente en la guerra de Afganistán y uno de los pocos supervivientes de una gran batalla, retirado por una herida en la pierna derecha (de ahí su cojera).
Muchas gracias por el aporte Rojo4, muy bueno como de costumbre.
ResponderEliminarEl ajedrez es un elemento que atrae a Ritchie, director cúlmen no suficientemente reconocido.
ResponderEliminarEn su mejor obra hasta la fecha ('Revolver')* es uno de los dos elementos que los genios y su aprendiz utilizan.
*Difícilmente va a ser capaz de superarla.
El ajedrez es un elemento que gusta a Ritchie, director cúlmen nunca suficientemente valorado.
ResponderEliminarEn 'Revolver'* los genios y su aprendiz lo utilizan para desarrollar sus tácticas.
*Difícilmente podrá superarla nunca.
Cierto lo que comentas del ajedez.
ResponderEliminarHe intuido por el comentario que Ritchie y "REVOLVER" te gustan ¿no? jajaja
Tus habilidades deductivas son sólo comparables a las de la criatura de Conan Doyle ;)
Eliminar'Revolver' representa un compendio de sabiduría a través de un simbolismo de lo más intrincado. Con sus errores -que los tiene- y su cambio de tercio radical respecto a películas anteriores Ritchie explica trabajada y trabajosamente -no en vano el guión tardó tres años en ser escrito- cómo el límite a lo que podemos alcanzar normalmente nos lo imponemos nosotros mismos. "¿Por qué un hombre tiene que hacer lo que no quiere hacer?".
Cuando uno se ha hecho "cliente" de Ritchie espera ver un "Lock and Snatch n' Rolla". Y 'Revolver' aunque tenga elementos comunes es otro concepto superior y más complejo. Hasta el momento Ritchie había hecho comedia de enredo con mafiosos brillantemente.
No me bastó verla una vez. La segunda me demostró que no se trataba de un ensayo rarito y pretencioso sino de una obra para recordar siempre.
"Conoce a tu enemigo"(1)="Conócete a tí mismo"(2).
(1) General Sun Tzu
(2) Templo de Apolo en Delfos
Has visto, ¿no? No sé por qué no me cogieron para el casting o algo...
ResponderEliminarBueno cuando haga la de REVOLVER veremos si la pongo a caldo o la tratamos bien jajaja
Muy buena critica, si señor. La película esta entretenida, se deja ver mas de una vez, y como seguidor del Canon estoy de acuerdo contigo con respecto a la fidelidad de Holmes, es mas, para mi esta es la versión mas fiel al auténtico Holmes que ha hecho nunca, desde luego mucho mas fiel que las de Basil o Cushing, favor de recordar que Sherlock jamás es descrito con ese sombrero de cazador y que si bien fumaba en pipa, tenía docenas de ellas según su estado de ánimo. Y nunca pronunció aquello de "elemental". Por otra parte Watson era un hombre joven que rondaría la treintena, y un auténtico soldado fogueado en la guerra de Afganistán acostumbrado al combate, muy alejado del médico regordete y de mediana edad de otras versiones.
ResponderEliminarEl tema está en que efectivamente Sir Doyle despachaba las escenas de acción en dos lineas y aquí se recrean en ellas, pero existir, existian.
Con respecto a la película... lo que mas me rechina es, (SPOILER)
Moriarty inventa un retorcido plan para asesinar a un embajador (o algo así) pegándole un tiro en la cabeza, y para disimular el asesinato... mete una bomba en la sala y asesina a todo el mundo???
O yo me perdí algo o es una soberana gilipollez.
Muchas gracias Gouel/Nanaif. Y muchas gracias por el estupendo comentario, muy de acuerdo.
ResponderEliminarLo que comentas de la bomba está muy bien visto jajaja.
Un abrazo.
Coincido contigo, creo que los escenarios de la película Sherlock Holmes retratan un Londres hermoso y elegante. Por lo demás puedo decir que la historia como tal es muy atractiva, la adaptación deja mucho que decir, no obstante creo que el reparto actoral es excelente y es lo que le da brillo a esta cinta. Me encanta es un film que recomiendo para toda la familia.
ResponderEliminarMuchas gracias Sofía por el aporte, es una buena recomendación la que haces. Un saludo.
EliminarLa película de Sherlock Holmes juego de sombras, me gusta mucho, el trabajo que hace el director Guy Ritchie, me parece increíble, pues está muy bien desarrollada y lograda, los actores también hacen un estupendo trabajo.
ResponderEliminarMe alegra que le gustase la película, Paola, y espero que quedara satisfecha con el análisis. Un saludo.
Eliminarmuy buena pelicula................. lo maximo
ResponderEliminarLa película no está mal, aunque a mí también me gustó más la primera. Quizá lo que más me haya gustado (en ambas) es que por fin alguien haya decidido a mostrar un Watson parecido al de los libros y no al de anteriores películas (esto último es un vicio muy extendido en Hollywood, pero de eso hablaremos otro día). Es cierto que físicamente Holmes no encaja tan bien, pero es que en cuanto a interpretación, el personaje le va como un guante a Robert Downey Jr. Por otra parte, hay que ver el jugo que se le ha sacado en ésta y otras adaptaciones (de todos los tipos y colores) a dos personajes como Irene Adler y James Moriarty. Pensad que Conan Doyle escribe sobre Irene sólo en una historia de Sherlock Holmesy sobre Moriarty sólo en tres, si no ercuerdo mal (Y en esas tres historias, creo que Moriarty sólo sale en total en dos escenas. El resto es Holmes hablando de Moriarty). Y sin embargo parece que en cada película sobre Sherlock Holmes hay que meter a Moriarty por medio (y a Irene Adler, casi lo mismo).
ResponderEliminarMuchas gracias por el aporte, Anónimo, resultó interesante.
EliminarA mi me gustó mucho la película, pero se hace un poco larga. Mejor la primera sin lugar a dudas. Quisiera comentar un fallo de guión: En la escena en que Sherlock roba la libreta a Moriarty éste le tortura mientras le habla de la música que suena, un pescador que atrapa un pez. Sherlock le roba la libreta y se la sustituye por otra. Pero al final, cuando se lo cuenta al propio Moriarty y éste mira la libreta que lleva encima, ya viene dibujado en las páginas un pescador que acaba siendo devorado por el pez, hecho que no podía saber Sherlock cuando hace el cambio de libretas.
ResponderEliminarMuchas gracias por el aporte, Rafa. Es interesante!
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