Es indudable que “Golpe en la pequeña China” es un auténtico
delirio. La colección de incongruencias, idas de olla, las acciones y las
resoluciones de escenas chanantes, es tremenda, tan absurda como divertida.
Y eso es parte de su encanto porque es algo buscado y lúdico, en cierto
sentido.
Y es que hay veces que te preguntas “¿quién ha escrito
esto?”.
Un cacao absoluto con tres chinos raros con poderes que no
sabemos quiénes son, y uno aún más raro que lanza rayos por los ojos, metidos
en una pelea de la que no entendemos nada. Así, sin anestesia y a traición.
Para esta escena fueron recreadas varias calles, lo que
encareció la cinta. Eso sí, el resultado fue muy bueno con unos efectos
especiales más que competentes.
Funcionan bien los cebos que se convertirán en ecos.
Nuestros protagonistas casi chocarán con el autobús de Egg Shen (Victor Wong),
el que será su aliado; también veremos fugazmente a la entrada en el callejón a
Lo Pan (James Hong), un aparente vagabundo que luego lanzará rayos por los
ojos… y la boca.
Jack atropellará a Lo Pan y sufrirá sus rayos, que le salen
por boca y ojos, cegándole brevemente, mientras el resto de brujos pelea con
unas armas surrealistas también, y se benefician de que a los otros se les
acabaran las balas… La posterior aparición de la banda secuestradora, “Los
señores de la muerte”, que se toman con calma eso de perseguir a nuestros
héroes, acelera la evasión. Una evasión en la que Jack tendrá tiempo de quitarse
su cazadora para que veamos su peculiar camiseta de tirantes.
-En “El tigre blanco”, los chinos con superpoderes irrumpirán "discretamente" para llevarse a la joven de ojos verdes, novia de
Wang. En una exhibición de luz, color y explosiones, para pasar desapercibidos
y en una demostración de sutileza, destrozarán medio edificio desde el techo
para llevársela volando… Que digo yo que con esos poderes no era necesario
armar ese pifostio…
-Tronchante es como entran en la amenazante “madriguera de
asesinos” nuestros protagonistas. Imposible verlo medianamente normal. Pasando por delante de los
guardas fingiendo que van a arreglar una avería sin instrumental ni equipo ni
vestuario… Al menos lo remediarán haciendo una especie de emboscada para
atraparlos. La imaginería con el ascensor que va inundándose, que abren repentinamente
(sic), es notable con esos muertos colgados y descompuestos. Una entretenida
escena.
-La escena de la tortura deja otros momentos hilarantes.
Primero no sabemos para qué los torturan, y luego los tirones de pelo y movimientos de
cabeza que hace el mago chino a Wang son para nota, así como las pelotitas que lanza a
Jack para golpearlo de circo…
“2000 años y aún no ha encontrado una tía a su gusto. ¡Vamos
Lo Pan! Si no tiene mujer será por otro motivo, ¿no?”
-Meten a nuestros intrépidos protagonistas en una sala, amarrados
en unas sillas de ruedas… ¿Es necesario que Jack vuelque la suya para quitarse
la venda de los ojos? Me da que no… Pero él lo hace igual.
La evasión posterior con la silla de ruedas es para verla a
cámara lenta. El momento en el pozo es de auténtica comedia del absurdo. Tampoco
se entiende para qué duermen a los compañeros de de Jack y Wang con ganas en
vez de matarlos. Algo que no afecta al chino, que como es mago debe ser inmune.
No os perdáis a Kim Cattrall corriendo y huyendo de los
villanos sin quitarse la mordaza de la boca. Eso sí, le favorece enormemente la
camiseta mojada. Y es que tampoco queda claro si quieren matarlos o no.
Nuestros héroes deducen que no, que quieren algo de ellos, por eso no los
matan, pero luego les disparan con muy mala intención…
-Jack: No tengo ni idea.
La fantasmal presencia incorpórea de Lo Pan es bastante
lasciva. Intenta sobar a la pobre chica inconsciente en zonas comprometidas,
aunque por fortuna no puede palpar.
-La heroica evasión será un éxito, con una salvedad, que
vuelven a capturar a Gracie, en lo que quizá podáis entender como una pequeña
reiteración… La captura un monstruo bastante feo, pero observador, ya que se
queda con la chica de ojos verdes. Y es que ahora los villanos
parecen percatarse de que la chica también tiene los ojos verdes, y que no sea
china no parece suponer un especial problema.
El tercio final es interesante, como una inmersión en un ochentero y truculento “Alicia en el país de las maravillas”. Aquí sería “Jack y sus amigos en el país del delirio y los magos”. Una fase, por los subterráneos de la ciudad para volver a entrar en los dominios de Lo Pan, de brillante imaginería y decorados, con más monstruos y criaturas. La absurdidad de la trama, con esos rituales disparatados, se mezcla con un brillante look visual de buenos efectos especiales y estupendas monstruosidades de látex. Entre los defectos de puesta en escena, de nuevo chanantes, tenemos ese momento en el pasillo del palacio de Lo Pan que cruzan nuestros protagonistas ante unos vigilantes sin que se entienda cómo no los ven… La idea del brebaje placebo para encarar la batalla final es otro guiño simpático de esta gran broma de Carpenter.
Carpenter mezcla con sapiencia lo desastrado con lo lujoso
en su realización, una puesta en escena a veces absurda o poco cuidada con
efectos notables para la época, para conseguir un impacto muy concreto y buscado.
-El clímax es un auténtico desfase. Chinos saltando de un lado para otro sin motivo ni necesidad y poniendo caras raras, personajes exhibiendo poderes que no habíamos visto hasta ese momento, como Wang, que de pasarlo mal con alguna chica karateka pasa a combatir con uno de los magos y enseñarnos que ¡es capaz de volar! Lo Pan y Egg Shen jugando a la Play Station a modo de combate en tronchante ocurrencia… Un malo vampírico que chupa la sangre de la joven de ojos verdes… Abanicos a lo Loco Mía en forma de escudo y bombas de colores que Egg lanza compulsivamente…Una escena indescriptible.
La resolución con Jack matando a Lo Pan, y Trueno (Carter
Wong) destrozando figuras mientras persigue a Wang, no tiene nombre.
Los tres supermagos esbirros de Lo Pan no pueden ser más cutres y decepcionantes. Después de demostrarnos que tienen mucha electricidad estática a cada rato, que pueden volar, tienen superpoderes y superfuerza y dominan las artes marciales, mueren de las formas más absurdas. A uno lo mata Wang cazándolo en uno de sus vuelos, el otro estalla de pena al ver muerto a Lo Pan (sic), y el último se pone a lanzar rayos al techo mientras sus presas huyen a 5 metros escasos frente a él… Luego lo rematan tirándole una estatuilla a la cabeza. Tal cual.
La presencia de un monstruo de pasajero en el camión de Jack parece coquetear con
la posibilidad de una secuela que nunca llegó.
Y es que cuando acabas el análisis y asumes sus desastres, la
incoherencia que la fundamenta, es cuando más valoras esta cinta de culto de
los 80, cuando entiendes su encanto de gamberrada autoconsciente,
voluntariamente desastrosa, una diarrea de diversión con el único propósito de
entretener al espectador sin matices. Esa fue la clave de su fracaso en
taquilla y su éxito posterior en el VHS y el DVD.
Carpenter siempre estuvo muy orgulloso de esta película, y
el tiempo, de alguna forma, le ha dado la razón. Como ocurrió con “La Cosa” (1982)
y otras, también fracasos en sus estrenos...
Hay un remake previsto con Dwayne Johnson como protagonista.
“Dime lo que quieras tía, no me enfadaré”.
el remake previsto con Dwayne Johnson como protagonista,pues la verdad no creo que este nada mal,the rock,sabe sacar mucho partido al humor,al menos se le da bien,ya veremos como será.
ResponderEliminarSí tiene vis cómica, Dwayne, aunque no creo que haga mucha falta, no sé en qué quedará.
EliminarUn saludo.