El arte de contar historias, de la forma que sea, es uno de los rasgos definitorios del ser humano, la necesidad de contarlas y la necesidad de oírlas, leerlas, verlas. Fascinarse, enamorarse, asustarse, vibrar con una historia, participar de ella, creerte que eres uno de sus personajes es esencial, innato casi, al ser humano que desde tiempo inmemorial ha sentido la necesidad de manifestarse artísticamente, de contar algo, de transmitir ideas, ya sea pintando rústicas figuras en las paredes de Altamira, realizando las más vistosas películas o escribiendo las más elevadas obras literarias.
Las artes plásticas lógicamente fueron antes, nuestros antepasados manifestaban así su día a día, su orgullo y necesidad de contar lo que hacían, sus gestas o rutinas, no era tanto la intención estética como la idea de contar algo, expresarse. Muy cinematográfico.
Me fascinaba cuando mi abuelo me contaba cosas de su juventud, de la guerra o de lo que fuera. Siempre nos fascinarán las historias, siempre nos emocionarán, por muy machotes que nos creamos y por muchos videojuegos que se creen. Así se siente el chaval, al ver aparecer a su abuelo (el estupendo y recientemente fallecido Peter Falk) con un libro mientras se recupera de una enfermedad, de vuelta de esas cosas y esas historias fantásticas y románticas con besos, algo que al abuelo le da igual porque va decidido a realizar su cometido, transmitir su amor por las historias, por el arte en definitiva, por la imaginación.
El escepticismo del chaval (Fred Savage, visto en “Aquellos maravillosos años”) redunda en lo comentado y supone una sutil reflexión acerca de esta juventud actual que cree saberlo todo y que nada podrá sorprenderle, que tiene acceso a toda la información posible pero que, por mucho que crea, seguirá en muchas cosas por debajo de nuestros mayores, aunque tengan más formación. Así nuestro chaval, que cree adivinar todas las situaciones, va viendo como sus esquemas se van desvaneciendo y como en las sucesivas interrupciones que realiza al relato de su abuelo se muestra absolutamente absorto, identificado y viviendo la historia que le cuentan como si fuera personal, asumiendo poco a poco su rendición incondicional hacia esa extraordinaria historia que le ha descubierto su abuelo.
Lo fascinante de “La princesa prometida” es que es capaz, a la vez, de subvertir y sublimar todos los tópicos del fantástico en un derroche de imaginación, ritmo y humor sin igual.
La confrontación de la modernidad, representada en ese videojuego que ahora produce cierta gracia, con la esencia clásica, primigenia, pura del arte de contar historias, representada en el libro, una defendida por un crio y otro por un maduro, es uno de los puntos culminantes, esenciales, que enriquecen “La princesa prometida”, que subliman esta adaptación. El chaval tiene que acabar reconociendo, seguramente sólo de forma inconsciente, que los grandes valores y sentimientos son eternos y que emocionarán, impactarán y serán vigentes para todas las generaciones futuras que están por venir, de la misma manera que lo estuvieron en todas las pasadas. Una enseñanza que le da su abuelo, que consciente de su logro, se permite vacilar a su nieto negándole la narración del último beso, a sabiendas de que el chico querrá saber. Un último beso que es, como todos lo que hemos visto la película o leído la novela sabemos, el más puro y apasionado, superando a los 5 que así habían sido considerados hasta aquel momento, y que todos una vez terminada la cinta hemos tratado de superar en pureza, sinceridad y pasión. Todo esto visible en una sonrisa final del chico al relato de su abuelo, un pequeño gesto que alberga todo, la magia, la imaginación y los recuerdos imperecederos, que alberga lo que es capaz de producir una buena historia.
Y el amor por la lectura, los libros, su aprecio que va de abuelos a hijos y a nietos…
Por todo ello este recurso metalingüístico es un acierto total y absoluto, un recurso en el que se recrea el bueno de Rob Reiner y su guionista William Goldman, autor del libro, jugando con la narración a voluntad como en esa escena donde el abuelo se confunde y vuelve a leer algo ya leído (cuando Robin Wright Penn salta del barco para intentar huir de sus captores). Goldman usa recursos metalingüísticos, otros, en su libro, como hiciera por ejemplo Cervantes con el Quijote.
Un abuelo lee a su nieto enfermo la historia de Westley y Buttercup. En el mágico mundo de Florín, un país inventado, Buttercup va a contraer matrimonio con el despreciable príncipe Humperdinck, tras haber prometido 5 años atrás amor eterno a Westley, un humilde granjero. Obligada por el príncipe y creyendo muerto a su amado se resigna a su destino cuando es raptada por Vinzzini y dos secuaces, Fezzik e Íñigo Montoya. Cuando el rapto parece consumado un misterioso hombre de negro persigue a la banda de secuestradores.
Centrándonos en la historia en sí, tenemos una película de fantasía, aventuras, amor, acción, humor y originalidad inauditas, imprevisible y de ingenio sin fin.
Todos los tópicos se vuelven del revés a la vez que se es totalmente respetuoso con las claves del género. Así los villanos en muchos casos no lo serán tanto, el protagonista muere, el malo malísimo no muere, el héroe ha pasado tiempo siendo alguien poco respetable…
La primera parte es absolutamente perfecta, todo es asombroso, original e ingenioso, después de ese comienzo no puedes despegarte de la pantalla, es imposible, porque cualquier cosa puede suceder, el secuestro, la persecución, el combate a espada, la lucha cuerpo a cuerpo del caballero negro contra André el Gigante, el duelo de ingenio…
La introducción, con la parte romántica que tanto exaspera al nieto que escucha pacientemente la historia, es un ejemplo de las necesidades narrativas que harán que una historia sea buena o mala. Esa introducción que dibujará los personajes, su relación y que creará ese vínculo invisible con el espectador, su identificación con esos personajes y qué les pasa, es imprescindible y está brillantemente tratada con las quejas del chaval que se frustra porque aparentemente no pasa nada, no hay combates, ni espadas, ni deportes… Pero es precisamente esa parte la que hará que desde casi el mismo inicio el chaval, como todos los espectadores, se vean atrapados, fascinados y “preocupados”, como reconoce el chico, con los devenires de los protagonistas.
Luego la arrebatadora imaginación de la historia hará el resto. Si el rapto y la persecución son brillantes, el duelo a espada y todo lo que le rodea te deja alucinado, uno de los grandes duelos a espada, no ya por la habilidad de los contendientes, sino por el respeto mutuo que se profesan para iniciar el duelo, los juegos de manos zurdas o diestras que realizan los espadachines, el sentido del humor divertidísimo que tiene, y que es constante durante toda la película, y los diálogos, tanto antes de empezar a luchar, como durante la propia lucha.
Sobre el guión y el infinito ingenio que éste tiene decir que no se limita sólo a la historia. “La princesa prometida” tiene algunos diálogos y frases que se han hecho míticas en la historia el cine.
Frases como: “Como desees”, “Amor verdadero”, “Estabas tan borracho que no podías ni pedir otra copa…”, “Antes destruiría una vidriera de colores que a un hombre como vos, sin embargo, no puedo permitir que me sigáis.”, “La muerte no detiene al amor, lo único que puede hacer es devorarlo.”
Diálogos como:
- Vinzzini: Supongo que os creéis muy valiente.
-Buttercup: Según con quién me compare.
Este otro entre Buttercup y Westley:
-No sobreviviremos.
-¡Tonterías! Lo dices porque nadie lo ha logrado nunca.
El que tiene Vinzzini e Íñigo Montoya:
-Vizzini: Inconcebible.
-Íñigo Montoya: Siempre usas esa palabra y no creo que signifique lo que tú crees.
Otro más:
-Íñigo Montoya: Parecéis un hombre decente. Lamentaré mataros.
-Caballero negro: Vos también lo parecéis. Lamentaré morir.
Lo cierto es que aparte de estos ejemplos, cada diálogo es una joya de verdadero ingenio, que es uno de los motivos más indiscutibles de la calidad, lucidez y encanto de la cinta. Un sentido del humor que engancha y entusiasma. Rob Reiner, que es un magnífico director, siempre ha destacado por éste aspecto, grandes diálogos y un gran sentido del humor en sus películas, sean éstas más o menos acertadas.
Dedicada a Chu4che
puff preciosa,nunca me canso de verla,me sé todas las frases,sencillamente encantadora esta pelicula.
ResponderEliminarCoincido 100%. Una de las películas que marcó mi infancia y mi adolescencia. No se la de veces que la he visto y espero que si algún día tengo hijos les guste tanto como a mi.
ResponderEliminarPor cierto..., debes destacar la frase memorable de Íñigo: Hola!, me llamo Íñigo Montoya. Tu mataste a mi padre. Prepárate a morir.
ResponderEliminarCierto Lunadrosas, de esas obras que tienen algo especial.
ResponderEliminarYo también unas cuantas querido Sergio y te aseguro que a tus hijos, cuando los tengas, les encantará. No falla.
Por cierto, no te anticipes jajajja. Aquí no se escapa naaada.
Bonita peli.... y muy bien sergio, espoileando al espoileador con la frase de Iñigo MOntoya...
ResponderEliminarPreciosa, sencillamente magnifica la musica de Mark Knofler...
Un mito de la juventud quien no recuerda esta pelicula, con los años la he visto un moton de veces siempre que la ponian en TV y me seguia gustando, recuerdo la mitica frase de Iñigo de Montoya que MRSambo nos contara en la 2ºparte, y Andrea el Gigante que por aquellos tiempos todos veiamos el Presing Catch y no lo creiamos jejej
ResponderEliminarSaludos
A mí también me encantó. Pero tu lo explicas mejor... x cierto, podría sugerir un comentario sobre anime (estudio Gibli, Miyazki, you know)? mis favoritas son El viaje de Chihiro, El castillo ambulante o La princesa Mononoke....
ResponderEliminarIncurro en anatema?
Gracias x instruirnos, gran MrSambo
Saludos y sonrisas,
R
Taillon no se ha podido resistir, es una peli especial para él y todo al que preguntes si ha visto esta peli te respoderá con la mítica frase jajaja. También mencionamos a Knopfler mañana.
ResponderEliminarAikman, ya te digo que nos lo creíamos jajaja ya no hay chavales como nosotros.
R, sabía que esta peli te gustaría mucho. Tu petición, por supuestoooo, soy muy fan de Miyazaki. Te faltó añadir TOTORO, la mejor película suya junto a Chihiro. Iba a empezar con una que me decepcionó bastante de él, ya veré con cual me pongo.
Besos y abrazos, gracias por comentar.
Oh, sin palabras. No se puede decir nada de esta película que la haga justicia.
ResponderEliminarBueno, sí, ¡pero ya lo ha dicho Taillon!
gracias por la dedicatoria maestro
ResponderEliminares una debilidad,no conozco a nadie que me haya dicho que no le ha gustado esta peli.
y eso que yo la descubrí bastante tarde.
todos son personajes tienen carisma.
es una historia simple (me refiero al argumento),como la de la mayoría de grandes películas. Pero una historía simple bien contada es mucho mejor que una historía quizá más compleja e interesante mal contada.
Curiosidades:
Iñigo Montoya (Mandy Patinkin creo que se llama) es el primer jefe de la serie Mentes Criminales.
en cuanto a lo de Miyazaki,tengo que ver Totoro todavía pero cuando vi El Viaje de Chiriro hace años me pareció increible,fantástica,es como embarcarse en un mundo nuevo con una historía fascinante.
yo también le pedí al maestro la crítica pero es un hombre ocupado.
Te lo mereces crack. Hay un huevo de peticiones y tengo que ponerme con ellas, revisar algunas de las pelis además, pero no podrás negar que cumplí con la primera tuya ehhh zanguango jajaja. Es muy difícil que no guste esta película y al que no le guste debe ser de esos que menciono al comienzo del texto jajajaja
ResponderEliminarsi,cumpliste. gracias crack
ResponderEliminarseguro que alguno habrá que esta peli no le guste.
en esta vida hay de todo
Y seguiré cumpliendo, aunque hacer una crítica buena tiene bastante trabajo y soy un poco perfeccionista.
ResponderEliminarDe todo hay y de todo debe haber, sí señor.
Espero no ganarme ninguna colleja si te digo que no la he visto...
ResponderEliminar¿¿¿¿¿No????? Collejas ninguna, mi más sentida envidia. El placer que supone verla por primera vez es... El placer de las primeras veces...menos las sexuales que pueden resultar traumáticas.
ResponderEliminarherep
ResponderEliminareso no es para colleja
Ya estás tardando
es imprescindible
herep
ResponderEliminarojala yo no la hubiera visto y pudiera verla de nuevo por primera vez.
ojala hubiera una pastillita para olvidar lo que uno quisiera y poder volver a vivirlo.
Chu4che, tu lo que quieres es que te pillen de Men in Black.
ResponderEliminarmrsambo
ResponderEliminaro el de memento
Ufff lo de ese es más duro, no te lo recomiendo yo jajaja
ResponderEliminarEnamorado de esta película. Llegué a ella a través de la BSO de Knopfler, sin hacer mucho caso, pero cuando la vi quedé prendado.
ResponderEliminarObra maestra. Esperando el momento justo para poder disfrutarla junto a mi hijo. Gracias una vez más MrSambo.
Hola, ya me he puesto al día. Muy bonita Sambo, siempre supe que tenías un don para esto. Me alegro de que el blog funcione tan bien, aunque con tu sensibilidad, tu habilidad para escribir y una prima que no te mereces, no es tan complicado que te vaya tan bien. Enhorabuena y sigue asi. Besos.
ResponderEliminarBipancho cuando vivas ese momento me encantaría que me comentaras la jugada, será inolvidable. Papá ponla otra vez jejeje. Lee mañana la segunda parte ehhh.
ResponderEliminarMe sonrojas Rikku, si bien es cierto que todo eso que comentas es verdad jejeje. Me alegra sobremanera que te guste y atenta la próxima semana.
Por supuesto. Debo encontrar tiempo para revisar el blog entero.
ResponderEliminarSabes que cuando la vea con el peque te lo haré saber. Pero queda mucho todavía. Tiene 3 años.
Bipancho, una edad así más o menos le hacía yo a tu nene, no me preguntes por qué. Pues si revisas el blog espero que te guste y lo encuentres entretenido e interesante. Y me acordaré, porque tengo buena memoria, del día del padre, el hijo y la princesa prometida. Un abrazo
ResponderEliminarIgualmente. Ah, gracias por el FF.
ResponderEliminarOk.
ResponderEliminarMe "acerco" al videoclub a pillarla.
Saludos.
Rikku gracias por la parte que me toca! Hacemos lo que se puede en el blog :)Me alegro mucho de que te guste jajajaja ♥
ResponderEliminarPoco más que decir de este grandiosa peli, al igual que algunos, también la descubrí hace poco, y recomendada por un gran amigo. Yo la disfruté con mi peque de cuatro años, le gustó muchísimo. Me imagino que algunos diálogos no los entendió, pero de todos modos supo captar el encanto que tiene esta peli, con su corta edad, creo que con esto se dice todo. Muchas felicidades por la primera parte MrSambo, voy por la segunda, ahora te veo allí, besos
ResponderEliminarAna, buena recomendación la de ese amigo jejeje. Tener nenes con esa edad y poder disfrutarla es algo muy especial, pero el hecho es que da igual la edad, ponérsela a los nenes es una excusa ideal para disfrutarla nosotros tantas veces podamos. Si le gustó con 4 años seguro que le entusiasmará cuando la vea otra vez con más. Será un recuerdo que guardará con cariño cuando crezca.
ResponderEliminarPd. Hemos batido el record de comentarios con esta entrada, record que ya batimos hace nada con Iron Maiden. Muchas gracias a todos por participar. Bien es cierto que muchos son míos, pero también cuentan jeje
hola! tengo 20 años y cuando era pequeña me encantava ver esta peli,
ResponderEliminarmis abuelos la comparon en VHS desde antes de q yo naciera y la podia ver cuando queria y creanme q fueron muchas veces!!! con esto de la tecnologia pues deje de ver pelis en vhs y crei q jamas la volveria a ver por q supongo q mis abuelos ya la han de haber tirado con otro puño de pelis. pero busque por internet y la encontre... me senti muy feliz por q es una historia muy linda y me encanta :D
Hola anónima, preciosa historia, el legado de los abuelos es incalculable. Me alegra que la hayas conseguido porque como podrás comprobar comparto tu entusiasmo por esta deliciosa película. Seguro que así los recordarás más aún.
ResponderEliminarUn abrazo.